Pinazo y los animales - II Pura raza, Huracán y Amazona Vittata- cotorras puertorriqueñas

La otra obra que salió de esa competencia, originalmente en blanco y negro, fue un hermoso caballo o yegua, no recuedo el sexo ni el nombre – “Pura raza”, óleo sobre lino, 51” X 38”, 2014. Y dije “originalmente” porque desde que comenzaron a ver las obras de Angel, algunos decían que el blanco y negro no gustaba en Puerto Rico, que aquí casi no se pintaba en blanco y negro, y que el trópico es muy colorido. Así que cediendo, quizás equivocadamente, a las críticas, Angel le dio color a la obra mediante una veladura de rojo, amarillo y azul.

Pues las veladuras resultaron ser los colores de la bandera colombiana pero en orden distinto y existe una disputa de linaje en el paso fino entre el puertorriqueño y el colombiano. Conflicto aparte a Angel nunca le gustó mucho la idea de las veladuras y, la verdad, en blanco y negro era más bello en nuestra apreciación.

Un año antes, en el 2013, Angel había pintado una pelea de gallos. Nunca las he precensiado a pesar de haber vivido unos años cerca de una gallera, y ser muy averiguado. No me gustan las matanzas de ninguna clase, ni pensadas ni instintivas, y es algo con respecto a la naturaleza que me ha costado conciliar, pues si la naturaleza responde a la creación divina, y es obvio que en ella exiten fuerzas destructivas, de alguna manera hay que entender la relación entre la espiritualidad con el sufrimiento que causan las destrucciones.

Así que Angel vio las peleas de gallos en imágenes y de éstas salió una obra extraordinaria que llamó “Huracán”, presagiando, quizás, lo que ibamos a vivir con María. Angel vió en las peleas de gallos la furia tormentosa la que asoció con las alas de los gallos en la contienda, y cómo las palmas son sacudidas por la ventolera– “Huracán, díptico, acrílico y oleo sobre lienzo, 70” X 51”, 2013. Este cuadro ha sido el preferido de mucha gente y a Angel el destino le tenía preparado, pocos años después, experimentar directamente vientos huracanados de verdad con María, y por eso siempre piensa que la obra  fue un presagio de lo que nos iba a suceder.

Este año a Angel le pidieron una obra de la cotorra puertorriqueña, a colores. Y aunque le gusta y pinta muy bien en blanco y negro, resulta también que Angel es daltónico, es decir, tiene dificultad en la forma de distinguir colores. En su caso confunde el rojo y el verde. Otros daltónicos tienen dificultad con el rojo y el amarillo.  Pero el problema era que, precisamente, la cotorra puertorriqueña no es solamente verde, sino que la distingue una franja roja en la cabeza. Así que nos preocupamos en si se podia realizar la obra.

La obra quedó súper y los colores también – “Amazona Vittata – cotorras puertorriqueñas”, oleo sobre lienzo, 24” X 36”, 2020. Angel no puede explicar exactamente cómo la hizo. Me dice que al ver la imagen mezcla los pigmentos de acuerdo a su percepción de colores, que puede o no coincidir con la imagen, pero que logra acertar los colores mediante continua experimentación. Yo tampoco entiendo cómo lo logra. Pienso también que su genialidad tiene mucho que ver con su capacidad de penetrar en la realidad hasta lograr acertar con precisión pasmosa cómo es y, entonces, pinta lo que quiere.